Ayer, miércoles, decenas de vecinos de la zona se concentraron a partir de las diez y media de la noche y hasta casi las dos de la madrugada y lograron que el operario que conducía la grúa que iba a efectuar la instalación de la antena se fuera. En dos ocasiones más, los vecinos de este lugar ya impidieron la instalación de la antena.

Un portavoz de los vecinos del inmueble afectado, que cuenta con once viviendas en alquiler y dos locales, explicó a Servimedia que volverán a concentrarse hoy y que han pedido la palabra para intervenir en el pleno de la Junta de Distrito de Retiro del próximo 3 de noviembre para explicar su situación y exigir que no se instale la antena.

Estos vecinos llevan meses denunciando la intención de Vodafone de instalar esta antena en su edificio, que se encuentra a escasos metros de una guardería infantil y un colegio.

Según los vecinos, aunque no hay evidencias científicas que prueben que la contaminación electromagnética generada por las antenas tiene efectos perniciosos para la salud de las personas, tampoco se ha demostrado su inocuidad. Además, temen que el peso de la estación perjudique a la estructura del edificio, construido en los años cuarenta y que ya está afectado por grietas justo en la vivienda que está debajo de la azotea.