Estos son algunos de los datos que destaca el Informe de Evaluación de los Programas de Cocaína del años 2007, realizado por Proyecto Hombre y presentado en rueda de prensa hoy en Madrid.

Según el informe, el perfil del consumidor de cocaína es el de una persona socialmente integrada, el 85% estan activos laboralmente, un 52% son solteros y casi el 50% vive con sus padres.

El alcohol o el cannabis para muchos son "drogas legales que significan una puerta de acceso a otras drogas como la cocaína", así lo afirmó Jesús Hernández, presidente nacional de Proyecto Hombre. "Mezclar alcohol y cocaína era una práctica habitual" para muchas de las personas que tratan de rehabilitarse en la asociación.

En cuanto a frecuencia de consumo, un 45,5% reconoce consumir diariamente esta droga, otro 45,4% dice no tener patrón fijo de consumo, mientras un 9,1% afirma consumir cocaína sólo los fines de semana, pero considera que ya tiene dependencia.

"La implicación de las familias es fundamental", aseguró Hernández. La pareja, en un 42,5% de los casos, y la madre, en un 32,8%, son piezas claves a la hora de ayudar al drogodependiente y de llevar un seguimiento de la situación durante los 18 meses que dura el programa.

"A veces la familia niega el problema, o no sabe como ayudar", comentó Gustavo, uno de los pacientes del programa, ya rehabilitado de su adicción. "Lo importante es tomar conciencia del problema que tienes y no eres capaz de afrontar".

La tasa de éxito del Proyecto Hombre es de un 20%, y de ese 20% que se rehabilitan, tan sólo un 10% suele tener alguna recaída.