Para lograr este objetivo, habitantes del bajo Aragón turolense realizarán una campaña de recogida de firmas entre los vecinos para elevarlas a los organismos internacionales.

La senadora socialista Ana Castañer, coordinadora del proyecto d acogida de los niños serbios, ha indicado que la iniciativa "no es sino una muestra más de la solidaridad de los turolenses. Existe un compromiso por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores de devolver a los niños el día 1 de septiembre y eso es inamovible".

Ana Castañer explicó que para que los niños puedan permanecer como refugiados mientras dure la guerra hay que lograr el consentimiento de sus familias y que las autoridades de su país emitan los correspondientes pasaportes. Estas gestiones se arían de manera individual, e incluso los niños podrían regresar acompañados por algún familiar adulto.

A pesar de los impedimentos legales, la campaña de recogida de firmas se va a a llevar adelante para tratar de conseguir que los niños yugoslavos permanezcan con las familias turolenses hasta el final de la guerra, según explicó Juan Carlos Alvarez, uno de los promotores de la campaña.

"Nos resistimos a aceptar que no haya soluciones para estos niños, que tengamos que devolverlos obligadamente l escenario de la guerra. Nos parece una auténtica monstruosidad", dijo Alvarez.

Los niños de la antigua Yugoslavia fueron recibidos ayer en el Ayuntamiento de Zaragoza por el alcalde en funciones, Acacio Gómez, y por la delegada de Cultura y Educación, Carmen Solano. Los niños tuvieron un apretado programa, preparado por el Servicio de Educación del Ayuntamiento de Zaragoza, que incluyó la recepción en el consistorio zaragozano, una visita a la exposición del pintor Francisco de Goya, un paseo por la principales calles zaragozanas y un almuerzo en el Parque de Atracciones, donde pasaron la tarde hasta su regreso a Teruel.