El diputado popular declaró, a raíz de la reciente convocatoria deestas ayudas por parte de la Consejería de Educación y Cultura, que en la inmensa mayoría de los casos las empresas creadas con estas subvenciones no tienen éxito ni continuidad.

Recordó que, de acuerdo con la evaluación hecha en su día por el propio Consejo de Gobierno, el resultado de este tipo de convocatorias, iniciadas en 1990, no es satisfactorio. Van-Halen cree que el dinero público empleado en este programa sería más rentable en otros proyectos.

"El Consejo de Gobierno y el grupo socialisa", agregó, "han desoído nuestras solicitudes para fortalecer el tejido empresarial, no han prestado atención al plan de choque contra el desempleo elaborado por el PP, han votado en contra de iniciativas rigurosas y eficaces y, a menudo, quieren lavar sus fracasos con convocatorias como éstas, destinando a posibles empresas juveniles cantidades ridículas, si las comparamos con las que el Gobierno Leguina destina a propaganda de autobombo o para protocolo".

El PP estima necesario un seguimiento de losproyectos, para que los madrileños conozcan el nivel de rentabilidad de la política de subvenciones, cuántas empresas son creadas, cuántas de ellas tienen continuidad y qué número de puestos de trabajo generan.

"Mientras nada se sabe del traído y llevado Pacto por la Industria", apostilló Van-Halen, "el índice de paro en nuestra comunidad es singularmente preocupante y el Consejo de Gobierno se muestra incapaz de conseguir revitalizar la economía de la región".

En su opinión, si se observa el "paorama de despilfarro" de la Comunidad de Madrid, con "abundantes" empresas públicas deficitarias, estas ayudas suponen una especie de "chocolate del loro" que no se salvan del "amiguismo y del electoralismo de la política socialista".