Camps, que realizó estas declaraciones durante la comparecencia en la sesión de control de las Cortes Valencianas, aseguró que "a esta comunidad no la va a parar nadie, ni el Gobierno socialista de Madrid ni el Partido Socialista en nuestra" región y añadió que se siente "profundamente satisfecho" de lo que está consiguiendo.

El presidente valenciano recalcó que echa en falta la ausencia de interés por parte del Gobierno central en la comunidad autónoma y manifestó que "hubiésemos querido una apuesta por la Copa del América como la hubo, y nosotros aplaudimos, por Barcelona o por Sevilla".

En este sentido, Camps afirmó que hasta el momento "la racanería" ha presidido las decisiones del Ejecutivo socialista en relación con este evento, que se ha podido poner en marcha "a base de deuda, de préstamos que tendrán que pagarse durante los próximos 40 años".