En este sentido, Blasco manifestó su incomprensión porque en un Estado como España haya que "soportar una política de vivienda errática y sin ninguna coherencia cuando (las comunidades) deberían tener plena autonomía" y se preguntó que "si el Gobierno Valenciano presenta el mejor balance de vivienda de España, ¿por qué tenemos que depender económicamente de un Gobierno Central que no sabe qué política de vivienda va a ejecutar?".

El consejero aseguró que Valencia está sujeta a los "caprichos económicos" de Zapatero y a los "desmanes de un Ministerio de Vivienda que no aporta ninguna solución a sus necesidades sociales" como la nueva iniciativa de construcción de pisos protegidos de 25 metros cuadrados, que, según Blasco "es la gota que colma un baso rebosante de despropósitos".