López Valdivielso hizo estas declaraciones a un grupo de periodistas en los pasillos del Congreso, después de quitar trascendencia al tiroteo ocurrido el pasado fin de semana en Bilbao, en el que estuvieron implicados agentes de la Etzaintza y de la Benemérita.

Tras señalar que este asunto está siendo investigado y que hay un proceso judicial abierto, el director de la Guardia Civil insistió en que se trató simplemente de un incidente "aislado" y "lamentable", que no puede ser interpretado como una falta de coordinación entre las fuerzas de seguridad.

"Tanto los miembros de la Ertzaintza como los guardias civiles", explicó, "creían que tenían enfrente a un comando terrorista y que ambos se estaban enfrentando a él. Estaban jgándose el tipo y no dieron un paso atrás, y eso es algo que los españoles no pueden olvidar".

López Valdivielso puso de relieve que da lo mismo el color del uniforme que cada uno vista, "siempre y cuando", precisó, "se sea eficaz en la lucha contra el terrorismo".

Preguntado si el origen del suceso pudo ser un fallo en los ordenadores de los cuerpos policiales, López Valdivielso dijo que todo se produjo con mucha rapidez y que "no dio tiempo a recibir la información con respecto al número de la atrícula que llevaban los coches".

Respecto a la entrevista mantenida ayer por el etarra "Txikierdi" y una delegación del Parlamento vasco, el director de la Benemérita se limitó a señalar que el encuentro fue "lamentable".