La AFHSE lamenta que la aparición de los dos primeros casos de Encefalopatía Espongiforme Bovina (ESB) esté provocando que numerosos medios de comunicación se refieran a las harinas cárnicas bajo el nombre genérico de "harinas".

"No está de más recordar que la mayor parte de las harinas tienen su origen en los cereales, productos que hasta el momento han demostrado cuplir todas las exigencias en materia de seguridad alimentaria, siendo perfectamente aptas para el consumo humano y animal", afirma la asociación.

Por este motivo, los fabricantes de harinas y sémolas reclaman a los medios de comunicación que a la hora de referirse a las harinas cárnicas no utilicen el término genérico "harinas", por el efecto negativo que puede tener entre los consumidores.

Asimismo, piden que en todas las noticias sobre esta materia se aclare que los posibles problemas sanitario afectan exclusivamente a las harinas de origen animal, "siendo las harinas y subproductos de los cereales alimentos sobre los que no se debe cuestionar su seguridad como consecuencia de la crisis producida por el 'mal de las vacas locas'".