Según ha informado Fomento, los operadores estarán obligados a conservar el numero de un cliente cuando éste decida cambiar de compañía que le da servicio, siempre que no modifique su ubicación geográfica.

Cuando uncliente quiera mantener su numero, pese al cambio, lo comunicará a la compañía en la que pretende darse de baja a través de la nueva empresa elegida para seguir recibiendo el servicio telefónico. La empresa receptora del abonado deberá pagar una cantidad compensatoria fija y por una sola vez a la compañía que cede su cliente.

Esta cantidad se fijará con arreglo al criterio del coste directo relacionado con el procedimiento a que da lugar la petición de conservar el número. Los costes de implantación d este nuevo modelo de numeración en cada compañía deberán ser sufragados por éstas directamente.

Además, las compañías con licencia para dar servicio telefónico tendrán que ponerse de acuerdo sobre las condiciones técnicas que deberán habilitarse para garantizar esta obligación a los ciudadanos, y en caso de falta de acuerdo será la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones la que actúe como árbitro.

Para realizar estos cambios en el sistema nacional de numeración, Fomento pone un plazo de sis meses a Telefónica, para que facilite la portabilidad de número en los distritos en donde se solicite esta posibilidad por la entidad habilitada para dar el mismo servicio de telefonía básica.

Además, la operadora solicitante deberá dar servicio en todos los distritos en los que haya solicitado la conservación del número de abonado, antes del plazo de los seis meses exigido a Telefónica.