Según informaron a Servimedia fuentes policiales, la reclamación se ha produce después de que el usuaro, de quien no se ha facilitado la identidad, acudiera a un taller de reparaciones, primero con un automóvil y, posteriormente, con una motocicleta, que habían quedado averiados tras repostar en la gasolinera denunciada.

Siempre según el denunciante, el mecánico que revisó ambos vehículos aseguró que las averías provenían de la utilización de combustible con un alto contenido en agua que afectaba a la carburación de los motores.

Junto con la denuncia, el afectado ha adjuntado una muestra de la gaolina para que su análisis determine si se le ha añadido agua u otras sustancias.