Según el sindicato, el Ministerio de Defensa niega a sus delegados, "de forma reiterada y sin explicación alguna", el ejercicio de sus legítimos derechos en defensa del colectivo de afiliados.

Para a central, esta discriminación es evidente, ya que se les prohíbe celebrar asambleas e instalar tablones de anuncios, a pesar de la acreditada representatividad de USO en el Ministerio de Defensa.

Asimismo, el sindicato asegura que incluso se ha impedido a sus delegados el acceso a la información que cualquier delegado de personal tiene derecho a recibir por ley.

Antes de interponer la demanda, los representantes de la sección sindical de USO dirigieron diversos escritos a los responsables del miisterio, con el fin de intentar solucionar la situación, pero hasta ahora no han obtenido respuesta alguna.

Según los sindicalistas, esta actitud supone un incumplimiento de los derechos en materia laboral recogidos en el real decreto 2.205/1980, de 13 de junio, título II, artículos 78, 79 y 80, y en el convenio colectivo para el personal laboral del Ministerio de Defensa.

Asimismo, USO considera que los responsables del departamento que encabeza Julián García Vargas también incumplen el artículo12 de la Ley Orgánica de Libertad Sindical.