USO ADVIERTE QUE EL MOVIMIENTO SINDICAL CORRE EL RIESGO DE CONVERTIRSE EN UNA "PIEZA DE MUSEO" SI NO SE MODERNIZA
- Zaguirre será reelegido por última vez secretario general de USO en el Cngreso de este fin de semana
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El secretario general de USO, Manuel Zaguirre, ha declarado, en una entrevista concedida a Servimedia, que el movimiento sindical debe modernizarse y adaptarse a las nuevas realidades, y advirtió que "si no lo hacemos, corremos el riesgo de que seamos una pieza de museo dentro de 25-30 años".
A su juicio, es necesaria una nueva cultura sindical, "basada en la reconstrucción de un humanismo del trabajo y la solidaridad en un planeta en el ue sólo lo económico, lo tecnologócio y lo financiero tienen vigencia", así como una nueva estructura sindical, poniendo en práctica el internacionalismo sindical.
Zaguirre insistió en que el movimiento sindical debe buscar, además, una nueva identidad y ser más abierto. "No puede ser sólo un movimiento de trabajadores ocupados, fundado en la estabilidad salarial y de empleo. Debe ser un movimiento social mucho más amplio, con trabajadores de todas clases unidos por el vínculo de la solidaridad", explcó.
Según Zaguirre, "el sindicalismo como lo hemos conocido, en su estructura, cultura, hábitos e inercias, hay riesgo de que se disipe, de que sea un instrumento con una capacidad ínfima para ser un agente protagónico en el futuro y tener un peso en esta nueva realidad, la mundialización económica".
El líder de USO explicó que la necesidad de estos cambios en el movimiento sindical formará parte del debate del VI Congreso Confederal de USO, que se celebrará en Madrid del 28 al 30 de junio bajo e lema "Otro sindicato, otra esperanza, otro futuro".
El Congreso de USO se vislumbra tranquilo y sin diferencias, ya que es prácticamente seguro que sólo habrá una candidatura a la Ejecutiva, la que encabeza Manuel Zaguirre, que se presentará por última vez a la reelección y que en el 2000 hará 24 años que ocupa el cargo de secretario general.
Zaguirre explicó que en este Congreso el sindicato apuesta ya fuertemente por la renovación, como lo demuestra el hecho de que siete de los doce miembros qe integran la lista a la Ejecutiva son nuevos. Añadió que, además, el compromiso es que en el próximo Congreso del año 2000 se vaya a una renovación "más extensa y de fondo", que afecte también a la secretaría general.
Aseguró que en esta renovación "no hay cuestiones de fondo". "La organización está madurando de una manera muy positiva y no se le puede pasar el arroz con un liderazgo tan dilatado como éste, aunque haya razones históricas que lo justifiquen", indicó Zaguirre, quien apuntó también que l sindicato tenderá en los próximos años a la limitación de los mandatos del secretario general.
DIALOGO SOCIAL
Zaguirre se refirió también al diálogo social iniciado entre los sindicatos UGT y CCOO, el Gobierno y la patronal CEOE, y criticó que hayan rechazado un posible acuerdo global y hayan optado por un modelo de negociación "disperso" que no aborda los grandes temas, "que pone mucho énfasis en los flecos y se desentiende absolutamente del mantel".
Según Zaguirre, USO pedirá, después de suCongreso, un encuentro con José María Aznar y/o el ministro de Trabajo, Javier Arenas, para trasladarles sus críticas sobre el diálogo social. En su opinión, deberían abrirse siete mesas sobre política económica, políticas activas de empleo, la reindustrialización del país, fiscalidad, el futuro de la estructura pública de la protección social, las relaciones laborales y la convergencia europea.
Zaguirre es partidario de poner en marcha una metodología de negociación "de culo de hierro, donde no se leanta nadie de la mesa, y el primero que lo hace, paga por ello". Además, se mostró a favor de que los medios de comunicación estén presentes en las reuniones de negociación, lo que permitiría "agilizar el diálogo".
Sobre las relaciones de USO con el Gobierno Aznar, dijo que si sus políticas son contrarias a lo que defiende USO, "confrontaremos con este Gobierno". Agregó que el hecho de que el Ejecutivo haga del diálogo una práctica habitual, no será "un atenuante o bálsamo para mirar hacia otro lado s las políticas sociales y económicas no son de recibo".
Pidió al nuevo Gobierno que aprenda del anterior. "En el pasado, y este Gobierno no debe perderlo de vista, la confrontación ha sido doble, con las medidas y políticas concretas de los gobiernos del PSOE en materia social y económica, pero también con actitudes de prepotencia y desprecio hacia el movimiento sindical muy acusadas. El Gobierno tiene la oportunidad y obligación de aliviar eso", concluyó Zaguirre.
(SERVIMEDIA)
26 Jun 1996
NLV