Según informó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), las ventas se redujeron 2,8%, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) lo hizo un 16%.

La compañía explicó que estos descensos son fruto de la menor demanda en algunos países, el impacto de los costes de energía y materias primas y a la menor actividad provocada por la huelga de transportes en España en el mes de junio.

Uralita prevé una "mayor y más rápida desaceleración de la actividad de construcción en España y en algunos otros mercados" en el segundo semestre del año.

La causa, explican, es un "exceso de oferta y una debilidad de la demanda en un contexto económico menos favorable y con mayores dificultades para acceder a financiación".

El fabricante de materiales de construcción prevé también posibles incrementos adicionales del coste de las materias primas, especialmente energía, "con la posible dificultad de transferir el incremente al precio final".

Además, cree que se producirá un "repunte de la morosidad en las cuentas a cobrar". Pese a todo ello, la compañía mantiene sus previsiones de cerrar el año con unas ventas y un beneficio neto en línea con las cifras de 2007.