Estas ayudas tienen como objetvo facilitar a los estudiantes la conclusión de su carrera o iniciar otros estudios complementarios con vistas a su incorporación al mercado laboral.

El Gobierno concede una subvención del 70 por ciento y la entidad financiera otro 10 por ciento. De ese modo, el interés del crédito para el alumno se queda por debajo del uno por ciento.

El importe máximo al que puede acceder este año cada estudiante es de 4.200 euros, con un periodo de amortización de tres años más otro de carencia.

Los intersados en solicitar un crédito de este tipo deberán ser estudiantes españoles o pertenecientes a algún Estado miembro de la Unión Europea, y estar matriculados en una universidad española.

Los alumnos de licenciatura, ingeniería superior o arquitectura deberán haber cursado un número no inferior a 120 créditos o tener aprobados los dos primeros cursos completos. Por su parte, los estudiantes de diplomatura, ingeniería técnica o arquitectura técnica tienen que haber cursado un mínimo de 60 créditos o teer aprobado el primer curso.

El Ministerio de Educación decidió el curso pasado suavizar los requisitos para el acceso a estos préstamos, permitiendo tener asignaturas suspendidas de cursos anteriores, debido a la escasa demanda, que no llegaba ni a un tercio de lo presupuestado.