En su intervención, la vicepresidenta del Gobierno se declaró "obsesionada" en lograr acabar con la pobreza en el mundo y aseguró compartir el objetivo de trabajar por el derecho fundamental de todos a una vida más digna.

Fernández de la Vega subrayó el orgullo que le produce saber que miles de jóvenes están comprometidos con la cooperación y la ayuda humanitaria y por acabar con la brecha "cada vez mayor" que existe entre el mundo desarrollado y los países pobres.

"Estamos en un mundo privilegiado y no podemos permanecer impasibles sin trabajar por lograr un mundo mejor. Todo lo que podamos hacer no será suficiente", reconoció, pero el objetivo "imprescindible" debe ser contribuir a construir un mundo mejor.

Sobre el desarrollo de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, la vicepresidenta aseveró que lograrlos "no es una utopía". "Son alcanzables", dijo, "y el compromiso de mi Gobierno en ello es total y absoluto".

Los estudiantes han asistido al encuentro en representación de los más de 10.000 jóvenes de 9 países que durante casi dos meses han debatido en clase y a través de Internet sobre la pobreza y la falta de acceso a los servicios sociales básicos en los países del sur.

La directora general de Intermón Oxfam, Ariane Arpa, recalcó que es "el deber de todos" dar un paso más en la lucha contra la pobreza y pidió a los gobiernos "que trabajen y asuman sus responsabilidades" en la erradicación de esta lacra.

El encuentro finalizó con un acto simbólico en el que la vicepresidenta escribió sobre una banda blanca el compromiso del Gobierno por la erradicación de la pobreza: "Menos pobreza, menos violencia, más educación, más salud y más igualdad, es igual a un mundo mejor".