UNA NUEVA TECNICA DE ADN CONSIGUE UNA SECUENCIA GENETICA MEDIANTE CODIGOS BINARIOS DE BARRAS

MADRID
SERVIMEDIA

Una nueva técnica de investigación del ADN, el MVR, permite una identificación de la secuencia genética de un individuo, mediante códigos binarios de barras, que puede diferenciar incluso a gemelos, según manifestó hoy en Madrid el doctor Angel Carracedo, catedrático de Medicina Legal de la Universidad de Santiago.

Hasta el momento, latécnica más utilizada para la identificación genética es el PCR, que con una pequeña muestra de sangre, semen o cabello permite determinar la paternidad de un hijo o la identificación de un delincuente.

La huella genética describe a las personas por medio de unas bandas, colocadas de forma determinada. Las múltiples combinaciones de estas bandas hace imposible que dos personas tengan la misma secuencia genética.

A diferencia de las técnicas clásicas de identificación humana, basadas en el análisi de las proteínas sanguíneas, el PCR "ofrece una fiabilidad del 99,9 por ciento y sólo basta una pequeña muestra de sangre", indicó el doctor Carracedo.

En cuanto a sus aplicaciones en el campo policial, esta técnica ha permitido identificar los cuerpos de personas calcinadas en accidentes de tráfico o la comprobación del cráneo de Menguele, por ejemplo, dijo Carracedo.

Desde la legalización de estas técnicas en 1991, los 6 departamentos de Medicina Legal y los institutos de toxicología españoleslas realizan a petición judicial o por iniciativa particular.

"Una prueba de paternidad puede costar 100.000 pesetas", según José Miguel Avendaño, responsable del único laboratorio privado que realiza esta prueba en el país, "dado que en ella suelen estar implicados la madre, el hijo y el posible padre, aunque el coste por muestra es de 30.000 pesetas".

Los resultados de estos análisis determinan que el 90 por ciento de los hombres que impugnan una paternidad son los verdaderos progenitores, mienras que sólo el 50 por ciento de los hijos que la reclaman tienen razón, según Carracedo.

"Estos resultados", añadió, "son hasta cierto punto lógicos, aunque nunca los podemos extrapolar a la población general, ya que partimos de una muestra sesgada".

(SERVIMEDIA)
31 Mar 1992
EBJ