Explicó que, "para frenar la expansión del sida, nos encontramos con el obstáculo de que en muchas ocasiones el paciente VIH positivo se muestra reacio a utilizar el preservativo aduciendo razones tales como su elevado coste, el no saber utilizarlo correctamente o prejuicios infundados".

Según dijo, el Movimiento Ciudadano Antisida intenta concienciar a toda la sociedad, y n especial a los seropositivos, de la necesidad de evitar conductas de riesgo, ya que "esto ayudaría a que no infectaran a su pareja y a que ellos sufran nuevas infecciones que agraviarían su enfermedad".

Abel García realizó estas declaraciones en un encuentro con la prensa en el que también participaron el vicepresidente de la Fundación para la Formación e Información sobre Tratamientos en el VIH, Peio López de Munaín; el jefe del servicio de Microbiología del hospital Morales Messeguer de Murcia, Satiago Moreno; y el presidente de la Asociación Nacional de Informadores de la Salud (ANIS), José María Catalán.

Abel García dijo que el enfermo de sida, especialmente si ha tenido adicción a las drogas, se topa con importantes obstáculos para conseguir un puesto de trabajo, a pesar de las ayudas públicas a las empresas que contraten a este tipo de personas.

"Esto se debe a que a la complicada situación actual del mundo laboral se le añade una enfermedad que suscita el rechazo social y la necesida de cumplir adecuadamente un tratamiento médico", explicó García.

Por su parte, López de Munaín señaló que aproximadamente el 70 por ciento de los enfermos de sida españoles son toxicómanos. Esa circunstancia, agregó, lleva a que, "mientras en Estados Unidos, con la introducción de los inhibidores de la proteasa, se ha producido un descenso de la tasa de la mortalidad de hasta el 60 por ciento, en nuestro país no alcancemos el 40 por ciento".

Según López de Munain, esta situación se agrava especilmente en el caso de los centros penitenciarios, ya que "actualmente, el 80 por ciento de los presos cumple condena por delitos relacionados con la droga. De este porcentaje, aproximadamente la mitad está infectada por el VIH. A esta situación debe añadirse la carencia de una infraestructura y equipos adecuados para cuidar a estos pacientes".

López de Munain aseguró que, además, no se cumple el reglamento penitenciario que estipula que a toda persona con una enfermedad grave e incurable se le debe coneder la libertad condicional.

Por otra parte, en este acto convocado por diversas organizaciones anti-sida se presentó la tercera edición del premio de periodismo "Frente al sida seámos positivos".