Los aventureros, Juan ignacio Azanza, Patxi Rodríguez, Jorge Moreno e Ignacio Oficialdegui, recorrerán los dos últimos grados de latitud norte del planeta, lo que supone avanzar en línea recta unos 220 kilómetros.

Sin embargo, en realidad tendrán que cubrir una distancia bastante mayor, ya que la marcha hacia el Polo Norte implica la constante superación de crestas de presin y obliga a rodear canales y zonas de hielo inestable.

Los expedicionarios parten hoy hacia Oslo y desde allí se dirigirán con destino a la travesía, que se proponen realizar entre los días 11 y 26 de este mes de abril, aprovechando el inicio de la primavera ártica.

Se trata de la época más propicia para esta aventura, ya que hay 24 horas de luz y es el único periodo en el que encontrarán apoyo logístico externo: una base científica rusa que se instala en la zona entre los días 2 y 30.

El gupo deberá soportar temperaturas de hasta 35 grados bajo cero, lo que además de un inconveniente se convierte en una ventaja, al permitir a los expedicionarios pisar el hielo en condiciones suficientemente estables.

El proyecto tiene un presupuesto de 60.000 euros, de los que el Gobierno de Navarra aporta 6.000. El presidente autonómico, Miguel Sanz, recibió el viernes pasado a los componentes de la expedición, a quienes entregó una bandera navarra para que les acompañe en su viaje.