Esta encuesta, a la que tuvo acceso Servimedia, tiene un carácter trimestral y se elabora a partir de un cuestionario realizado a empresarios de 10.000 compañías de la industria, la construcción y los servicios de todo el país, excluyéndose el sector agrario y las Administraciones Públicas.

Según las previsiones de los empresarios españoles, que contradicen a las expectativas oficiales, el empleo caerá en el conunto del año en todos los sectores, especialmente en la construcción, un 1,5%, seguido de la industria (-0,8%) y los servicios (-0,2%).

Esto significa que en la industria desaparecerán entre finales de 1995 y finales de este año aproximadamente 15.500 puestos de trabajo, mientras que en la construcción se perderán unos 8.500 empleos y en el sector servicios cerca de 7.000.

Atendiendo al tamaño de las empresas, el empleo caerá fundamentalmente en las de más de 250 trabajadores, un 1%. También se prderá empleo, aunque en menor medida, en las compañías con una plantilla de entre 51 y 250 trabajadores (un 0,4%), así como en las que tienen de 6 a 50 trabajadores (un 0,3%).

PREVISIONES POR AUTONOMIAS

Por comunidades autónomas, las previsiones de los empresarios varían. Entre los optimistas, es decir, los que auguran un aumento del empleo, figuran los empresarios de Baleares, que prevén un aumento del empleo del 1,5%, seguidos de los de Murcia (1%), Canarias (0,4%), Valencia (0,3%), Cataluña (0,2% y Navarra (0,1%).

Los empresarios de las restantes autonomías esperan, sin embargo, una disminución del empleo a lo largo de este año. La mayor caída se registrará en Asturias, del 8,8%, junto con Extremadura (-2%), Andalucía (-1,7%), País Vasco (-1,5%) y Galicia (-1%).

También descenderán los puestos de trabajo, según las expectativas de los empresarios, en Castilla-La Mancha (-0,6%), Aragón (-0,4%), La Rioja (-0,4%), Cantabria (-0,2%), Castilla y León (-0,2%) y Madrid (-0,2%).

Los resultaos de esta encuesta pueden ser aún más desfavorables si se tiene en cuenta que en las Administraciones Públicas, que no están incluida, el empleo caerá en 1996, ya que la oferta de empleo público no cubre siquiera las bajas por jubilaciones que se producirán. Además, en la agricultura también continuará presumiblemente la tendencia a la baja.