La experiencia se realiza bajo el control de los pilotos y entrenadores aéreos de la base de Ramenskoye, a cincuenta kilómetros de Moscú.

Los "míticos" aviones supersónicos MIG-25, MIG-29 o SU-27 pueden alcanzar velocidades de hasta 3.000 millas/hora.

Además de elegir el tipo de avión, el turista también puede optar por cuatro posibilidades de vuelo: a baja altura (a 200 metros sobre el suelo); vuelos a nivel estático; vuelos supersónicos o vuelos con las maniobras más avanzadas.

La propuesta incluye, por una cantidad que oscila entre 8.500 y 11.500 euros (dependiendo del tipo de avión elegido), el viaje de ida y vuelta a Moscú, tres noches de alojamiento y desayuno en hoteles de cuatro estrellas superior, asistencia, traslados, guía permanente y seguro de viaje.