La caravana partió a las cuatro y media de la tarde desde la sede de Alditrans, en Oyarzun, hasta el Hotel Urdanibia de Fuenterrabía, en cuya cafetería fue visto el empresario por última ve antes del secuestro.

Al finalizar el recorrido de la caravana, Jesús Rodríguez, miembro de la Iniciativa Ciudadana de Irún y Fuenterrabía, leyó un comunicado en el que se pedía "el cese de la humillación y el sufrimiento a que es sometida una persona y con ella su familia y el conjunto de la sociedad".

"No podemos entender", añade el texto, "la sinrazón de un gesto tan bárbaro y doloroso como inútil e injusto. Queremos hacerle saber que compartimos su tristeza" y "que todas nuestras voces y tambén nuestros silencios, al igual que nuestros aplausos, están y estarán siempre a su lado".

Todos los coches llevaban en sus ventanillas y capós el lazo azul con el lema "José Mari Etxera" (José Mari a casa). Luces de posición encendidas, limpiaparabrisas en marcha y bocinas sonando han sido los elementos comunes de una caravana en la que no ha habido ningún incidente. La 'Ertzaintza' acompañó a los participantes y reguló el tráfico en la Nacional I.