Según las investigaciones emprendidas, la citada bolsa de agua no fue detectada por lo controles habituales que analizan la calidad de los crudos procedentes del exterior. Al almacenar el crudo en el un tanque que se encontraba a 140 grado de temperatura, se originó una evaporación repentina del agua con una presión que hizo explotar el tanque y provocó a su vez, alguna chispa que ocasionó el incendio de casi 5.000 metros cúbicos de crudo.

El comité de dirección del Plan de Emergencia Exterior del Sector Químico de Huelva, ha aconsejado a la propietaria de la empresa siniestrada, que amente la frecuencia de controles analíticos para todo tipo de productos así como que se adecúen los procesos para evitar que que se produzcannuevas evaporaciones de agua en los tanques que la contengan.

Aunque el incendio provocó inicialmente escenas de cierta alarma en las poblaciones más próximas, Palos de la Frontera y Huelva capital, tan sólo hubo que lamentar daños materiales de importancia y no personales.