En un artículo publicado en la revista que edita la Federación del Metal de UGT, Ruiz Ocaña indica que el problema de las ventas de coches no está únicamente en su precio, sino también en el fuerte aumento del empleo temporal, que hace que mucha gente no pueda acceder a la compra de este tipo de productos.

Según los datos de RuizOcaña, al menos un 25% de los trabajadores que han querido comprar un vehículo no han conseguido en los bancos y las financieras el crédito que necesitaban por ser trabadores eventuales y no tener un salario que posibilite el pago del préstamo.

Por ello, Ruiz Ocaña insiste en que debe quedar claro que la difícil situación que atraviesa el sector de automoción, como consecuencia de la fuerte caída de las ventas de coches que se está registrando en los últimos meses, "está siendo provocada tanto por losempresarios como por el Gobierno".

El responsable de Automoción de UGT prevé en este último trimestre del año una masiva petición de la aplicación de expedientes de regulación de empleo por parte de los empresarios en el sector, en base al argumento de la caída de las ventas de coches.

Ruiz Ocaña insiste en que es la política económica diseñada por los empresarios y ejecutada por el Gobierno la que provoca esta situación y ocasiona un "empobrecimiento galopante de nuestra sociedad". Por ello, recama un cambio de la política actual, que permita unos salarios "dignos" y estabilidad en el empleo.

A su juicio, de continuar con las formas de contratación y las tablas salariales actuales, las nuevas capas de trabajadores no podrán nunca comprar determinados productos, como, por ejemplo, un coche, por lo que solicita a los empresarios y al Gobierno que reflexionen sobre este asunto.