UGT Y CCOO PIDEN UNA SUBIDA DEL SMI DEL 8,3% EN EL 2000, CON LO QUESE SITUARIA EN 75.000 PESETAS AL MES

- Exigen al Gobierno una verdadera negociación sobre este salario

MADRID
SERVIMEDIA

UGT y CCOO pidieron hoy una subida del salario mínimo interprofesional (SMI) para el año 2000 del 8,3%, con lo que su cuantía subiría de las 69.270 pesetas al mes actuales a 75.000 pesetas, según informaron hoy, en rueda de prensa, los secretarios de Acción Sindical de ambos sindicatos, Toni Ferrer y Fernando Puig, respectivamente.

Esta es la propuesta quellevarán el próximo día 28 a la reunión preceptiva que el Ministerio de Trabajo mantendrá con los agentes sociales, antes de que el Consejo de Ministros apruebe la subida del SMI. Ferrer y Puig explicaron que remitirán hoy su propuesta al Gobierno, los grupos parlamentarios y los partidos políticos para que la defiendan.

Esta subida del 8,3% que piden los sindicatos ha sido calculada teniendo en cuenta la recuperación del poder adquisitivo perdido por el SMI en 1999 por el descontrol de los precios (e noviembre era de 9 décimas), la previsión de IPC del 2000 (2%), la productividad (1%) y la participación de las rentas del trabajo en la renta nacional y en la bonanza económica.

El incremento que reclaman los sindicatos estará muy por encima del que previsiblemente aprobará el Gobierno. En años anteriores el SMI ha subido lo mismo que la previsión de IPC, aunque este año podría hacerlo algo más, si el Ministerio de Economía accede a la pretensión de Trabajo de que el SMI recupere el poder adquisitiv perdido en el 99, con lo que el aumento estaría próximo al 3%.

Sobre este asunto, Ferrer tildó de "escenificación" la presión que Trabajo está haciendo a Economía, puesto que es el Gobierno el que incumple el Estatuto de los Trabajadores al no revisar semestralmente el SMI y la Carta Social Europea. Por ello, exigió al Ejecutivo que "se deje de maniobras electorales y de propaganda" y abra una verdadera negociación con los sindicatos sobre el SMI.

Los responsables criticaron que la reunión del da 28, que dijeron que coincide curiosamente con el día de los Santos Inocentes, sea una consulta de puro trámite, y exigieron al Gobierno una verdadera negociación que permita acercar el SMI al 60% del salario medio nacional, tal y como establece la Carta Social Europea.

Según los sindicatos, actualmente el SMI sólo representa el 36,1% del salario medio, cuando en 1996 suponía el 45%. Añadieron que el SMI, además, ha perdido 1,6 puntos de poder adquisitivo desde 1996, y es de los más bajos de la UniónEuropea, estando sólo por delante del de Grecia y Portugal y representando menos de la mitad del salario mínimo de los cuatro países más avanzados.

Puig y Ferrer indicaron que con una subida en el 2000 del 8,3%, el SMI se situaría en el 39,1% del salario medio nacional, y explicaron que si se mantiene este esfuerzo en unos cinco años podría llegar al 60% del salario medio, lo que equivale en la actualidad a algo más de 134.000 pesetas al mes (incluyendo las pagas extras).

RENTA LABORAL

Los sindcatos quieren también limitar el SMI al ámbito laboral, de manera que este salario deje de ser una renta presupuestaria de referencia para calcular cuestiones como el subsidio de desempleo, la pensión mínima, las ayudas a la vivienda, la concesión de becas y el acceso a la justicia gratuita, entre otras muchas. Además, exigen una cláusula de revisión salarial automática para el SMI que corrija las desviaciones del IPC, como ocurre con las pensiones.

Según Puig y Ferrer, todas estas cuestiones deben abrdarse en un proceso de negociación con los sindicatos que comprometa al Gobierno y a los grupos parlamentarios. Para Ferrer, el SMI es "el termómetro de la justicia social en un país", y no se pueden mantener situaciones de "auténtica miseria" y decir a los trabajadores que tienen las rentas más bajas que no pueden tener un salario mínimo de 75.000 pesetas al mes.

Lo mismo opina Puig, quien cree que "no puede haber ningún partido político que practique la sordera ante esta reclamación de subida del SI, ni nadie que desee gobernar que pueda negar a medio millón de trabajadores una renta casi de subsistencia".

El SMI afecta directamente a unos 500.000 trabajadores, según los sindicatos (260.000, de acuerdo con Trabajo), pero su importancia radica también en que se utiliza como referencia para calcular muchos aspectos, como el subsidio de desempleo, la pensión mínima, las ayudas a la vivienda y la concesión de becas.

(SERVIMEDIA)
23 Dic 1999
NLV