Tras celebrarse ayer el acto de conciliación sin que se llegara a un acuerdo, los sindicatos anunciaron hoy en rueda de prensa la convocatoria de una huelga para los mencionados días ante la negativa de la patronal a aceptar ninguna de sus reivindicaciones.

Según señaló el secretario de acción sindical de FIA-UGT, Ramón Ruiz, el salario bruto de un trabajador del sector es de 834 euros al mes y, si trabaja a turnos, de 890 euros.

Las principales reivindicaciones son que el convenio tenga una vigencia de tres años, un aumento salarial del IPC más un 0,75%, un plus de festivo de 60 euros, 42 euros al mes por las horas extras al hacer caja al final de cada turno, y una paga anual por quebranto de moneda de 600 euros, ya que los trabajadores son responsables de los posibles desajustes de caja. Todo ello supone, según los sindicatos, un aumento de 87,55 euros al mes.

Por su parte, el secretario de acción sindical de Fiteqa- CCOO, Salvador López, subrayó que los días elegidos para la huelga están en medio de una semana para molestar lo menos posible a los usuarios y que sólo buscan defender los intereses de los empleados. "No es una convocatoria mediática", insistió López.

Ambos sindicatos reiteraron que están dispuestos a negociar con las patronales en cualquier momento, aunque aseguran que las negociaciones se ven interferidas por el conflicto que los empresarios de estaciones de servicio tienen con las petroleras por los contratos de suministro en exclusiva.