En la presentación del Congreso que se celebrará entre el 1 y el 4 de junio, Méndez aseguró hoy que ésta será una edición con marcado "carácter internacional", en la que se planteará a la Confederación Europea de Sindicatos (CES), de la que el líder de UGT es su presidente, la implantación de este SMI comunitario.

Además, dentro del Programa de Acción a desarrollar durante los próximos 4 años, que la dirección del sindicato presentará a sus delegados, UGT incluye la exigencia "a las empresas españolas multinacionales para que promuevan el diálogo social en sus centros de trabajo en cualquier parte del mundo".

El líder sindical destacó también, dentro de la política internacional de UGT, su apoyo al proceso de unificación de la Confederación Mundial del Trabajo (CMT) y la Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres (CIOSL).

Asimismo, subrayó que UGT es la única organización sindical española que destina el 0,7% de sus ingresos por las cuotas cobradas a sus afiliados a programas de ayuda a países en vías de desarrollo.

Dentro de su Programa de Acción, el sindicato apuesta de nuevo por un cambio en el sistema productivo que refuerce la negociación colectiva, así como el desarrollo de algunos aspectos pendientes de la ley de libertad sindical.

Asimismo, recoge la intención de impulsar la ley de autonomía personal, que establece el derecho a la atención de las personas dependientes, así como la inclusión de las enfermedades psico-sociales, como el estrés o el sindrome de "quemado", dentro del listado de enfermedades profesionales.

TRABAJO Y PROGRESO

El 39 Congreso Confederal de UGT se desarrollará durante cuatro días en el Palacio de Congresos de Madrid y en él participarán 800 delegados y unos 1.000 invitados, entre representantes sindicales y políticos.

En la inauguración participará, en primer lugar, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que dará paso al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

En este primer acto del Congreso intervendrán también el secretario general de CCOO, José María Fidalgo, y el de la CIOSL, Guy Ryder, así como el de la CES, John Monks.

A continuación, Cándido Méndez leerá el informe de gestión, que será debatido tras el almuerzo antes de que los delegados voten sobre su contenido, en un proceso que terminará rozando la medianoche.

Durante los dos días siguientes se debatirán las diferentes propuestas y las enmiendas presentadas al Programa de Acción, que en esta edición ascienden a 1.604. Por último, el sábado, día 4, tendrá lugar la votación de los órganos confederales y del secretario general, que cerrará el Congreso con un discurso de clausura.

De momento, la única candidatura presentada es la del actual secretario general, aunque hasta que comience el Congreso no se abrirá oficialmente el periodo de presentación de las candidaturas.

110.000 DELEGADOS

Según Méndez, la UGT llega a este Congreso en un "buen momento", sobre todo tras superar "un periodo político hostil" en los dos últimos años de la legislatura del PP, que coincidieron con los 24 primeros meses de la dirección actual del sindicato.

Este Congreso se celebra tres años después del último, que tuvo lugar en marzo de 2002, ya que así se aprobó en aquella edición, aunque previsiblemente en esta ocasión se volverá a los mandatos de cuatro años.

UGT ha alcanzado en estos tres años "el mayor número de delegados" desde la restauración de la democracia, con un total de unos 110.000.