Los socialistas proponen que etos fondos se destinen a las cuatro provincias españolas que tengan la mayor tasa de desempleo y menos del 75% de renta respecto del PIB nacional, y que dentro de estas cuatro tengan prioridad los proyectos que generen un mayor número de empleos estables y sostenibles.

En la exposición de motivos, argumentan que el "injustificado" reparto de los fondos de cohesión no contiene un criterio objetivo de adjudicación y distribución dentro de cada uno de los Estados miembros receptores.

Por este motivo advierten de la necesidad de establecer un modelo de distribución de estos 200 millones de euros, de forma que beneficien realmente a las provincias con mayores problemas sociales y económicos.