Según informó hoy la Comisión, España pone "trabas injustificadas" a la venta de ste tipo de portabicicletas para coches que, según fuentes del sector de las bibicletas, son más cómodas y seguras que las tradicionales bacas colocadas sobre el vehículo.

De hecho, la normativa española sólo permite ese tipo de dispositivos sobre la baca, lo que la Comisión considera como una medida de efecto similar a prohibir la importación de los portabicicletas que se llevan sobre el portón trasero del vehículo.

La demanda de la Comisión tiene forma de aviso motivado, lo que supone el segund paso del procedimiento de infracción, tal y como recoge el Tratado de la Unión.

Si las autoridades nacionales no responden satisfactoriamente en dos meses, la Comisión puede elevar el asunto ante el Tribunal de Justicia, dado que se trata de una violación de el derecho a la libre circulación de bienes en los países comunitarios.