Pérez-Moreno indicó, en rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos tomados ayer en la reunión del comité de gobierno de su partido, que "le diría a Pujl que agradecemos su interés, pero que no se preocupe, porque es un tema del que ya nos ocupamos nosotros".

El dirigente de Unió dijo que "hace 20 años que hay gente interesada en que la coalición no funcione" y que "es normal que si va bien sus adversarios políticos quieran erosionarla, pero hasta ahora hemos superado todos los escollos, no debemos preocuparnos".

Por su parte, el secretario general de Convergència Democràtica (CDC), Pere Esteve, se lamentó, en otra rueda de prensa posterior a laejecutiva de su formación, de que CiU está dando una imagen de "discrepancias internas" desde el pasado mes de diciembre, y advirtió que el buen funcionamiento de la coalición es incompatible con la "diferenciación sistemática", aludiendo a UDC.

Según Esteve, en el comité ejecutivo de Convergència celebrado anoche, tras la reunión del comité de enlace de la coalición, hubo varias intervenciones sobre la posibilidad de "ruptura" con Unió, aunque dijo que ninguno de los dirigentes convergentes apostó po romper con su socio.

"En los últimos meses", dijo el secertario general de CDC, "el funcionamiento no ha sido positivo. Desde diciembre ha habido una aparición de la diferenciación sistemática de la coalición en los medios de comunicación".