De ellas, 763 fueron conultas y las 289 restantes reclamaciones. El número total de quejas y consultas presentadas los pasados meses de enero y febrero ha descensido ligeramente respecto a las presentadas en las mismas fechas de 1992, que fueron 1.091 (757 consultas y 334 reclamaciones).

Según los responsables de la UCE, este descenso de las quejas durante las rebajas se ha debido fundamentalmente a una mayor vigilancia del sector, como consecuencia de las campañas que han realizado las organizaciones de consumidores y la Adinistración.

A su juicio, ante los insistentes rumores sobre una posible regulación de las rebajas por parte de la Administración y las comunidades autónomas, "se ha notado una mejoría en la actitud general de los minoristas".

No obstante, los responsables de esta organización de consumidores consideran que las situaciones en las que los consumidores ven mermados sus derechos se repetirán año tras año mientras no haya una regulación específica para la temporada de rebajas.

Según la UCE, los ectores que han dado lugar a un mayor número de consultas y reclamaciones de los consumidores durante las pasadas "rebajas de enero" fueron los de ropa, calzado y artículos para el hogar.

Las causas más frecuentes de reclamación fueron la no aceptación de tarjetas de crédito para pagar los productos rebajados, la venta de saldos por rebajas, la ausencia o incorrecciones en el etiquetado, la imposibilidad de devolver el producto adquirido y la venta de productos defectuosos.

A las reclamaciones reibidas por la UCE se suman las registradas por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que fueron muy inferiores, situándose en un total de 52 quejas durante las pasadas "rebajas de enero", según los datos facilitados por esta asociación.

Los motivos de estas rebajas son similares a los descritos anteriormente. Así, alrededor del 30 por ciento de las quejas fueron ocasionadas por devoluciones de artículos no aceptados por el comercio y otro 30 por ciento por la no aceptación del pago con taretas de crédito.

Otro 20 por ciento de las reclamaciones tuvieron que ver con la identificación incorrecta del fabricante o artículo o con la ausencia de factura y garantía del mismo y el 20 por ciento restante por la venta de saldos por rebajas.