Actualmente, sólo algunas comunidades, como Madrid o Castilla-La Mancha, comienzan en esta fecha el periodo de rebajas.

UCE entiende que esta medida supondría un importante beneficio para los bolsillos de los consumidores, "más aún en la actual situación de aumento de precios y de sobreendeudamiento de las familias españolas, que atraviesan serias dificultades para llegar a final de mes".

Desde su punto de vista, el adelanto de las rebajas de invierno al 2 de enero en todo el Estado garantizaría, además, un consumo sostenible a lo largo de tiempo y rebajaría las dificultadas económicas familiares durante la llamada "cuesta de enero".

Por otro lado, la organización denunció la práctica que muchos comercios llevan a cabo durante las rebajas de entregar "vales" en lugar del dinero, cuando el cliente pretende devolver un artículo.

Según UCE, es la denuncia más repetida de los consumidores y supone el 80% de las reclamaciones que la organización recibe relacionadas con las rebajas. Esta práctica, aunque legal, supone "un claro abuso en contra de los derechos del consumidor, condicionando su libertad de compra".