in embargo, señalaron los portavoces de la diplomacía israelí en España, esta cifra sigue representando una participación muy pequeña (sólo un 1,2 por cien) sobre el volumen total de turistas acogidos por aquel país durante el año pasado, 1.960.000 personas.

Estas cifras de intercambio turístico, que comparadas con las de un recpetor mundial como es España, parecen muy bajas, son un motivo de satisfaccvión para los responsables de la política turística de israel, ya que se trata de un país pequeño, uns 23.000 kilómetros cuadrados, y una población aproximada de unos 5 millones de personas.

No obstante, el Gobierno de Israel es consciente de que su país se ha convertido en un punto de interés para los "tour operadores" y han iniciado un fase de expansión y divulgación que pasa por la reciente promoción de varios puntos de atracción turística en la feria del sector que se celebra en Madrid, Fitur.

En la actualidad, existen varias iniciativas de desarrollo urbanístico con vistas al turismo en zons de "sol y playa" de Israel que aumentarán sensiblemente su capacidad de alojamiento, como es el caso del Mar Negro. Además, la apuesta turística del Gobierno pretende ser la de un cliente de calidad, que no reduzca en ningún momento el actual saldo de ingresos por turista, cifrado en unos 1.300 dólares, en torno a las 200.000 pesetas.

El interés por la promoción turística de Israel en España y el resto del "viejo continente" reside en que es en este área donde parece estar el mercado natural de la oerta turística de Israel, porque en 1993, del total de entradas de visitantes un 60 por ciento eran de procedencia europea, un 29 por ciento procedían de America.

Para 1994, las expectativas de los resonsables turísticos del país es llegar a los 2,5 millones de visitantes, a pesar de los informes sectoriales con los que cuentan otras administraciones turísticas europeas, como la española, en los que se describe una situación de inestabilidad en Oriente Próximo que beneficiará de manera destacada las cmpras de "paquetes" por los operadores en las zonas playeras españolas del Mediterráneo y Canarias.