La Consejería de Obras Públicas, Transportes y Comunicaciones ha aprovechado el cierre del conflictivo túnel para llevar a cabo una revisión integral del mismo, de la que se deduce que no existen anomalías.

La Comunidad Foral anunció esta semana, a propósito de este nuevo incidente, que se retomará el expediente de responsabilidad civil incoado contra la empresa que construyó el túnel y que se vio paralizado por la muerte de la funcionaria que fue nombrada jueza instructora.

Desde su apertura al tráfico en 1997, el túnel de Belate, que salva el puerto del mismo nombre, ha tenido que ser cerrado en varias ocasiones por desprendimientos -el primero tuvo lugar un año después de su inauguración-, al parecer debido a problemas estructurales que el Gobierno foral ha atribuido siempre a la empresa constructora, Elsamex S.A.