Cataluña, Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura no estuvieron presentes en la sesión, mientras que sí intervinieron los consejeros de Vivienda de Murcia, de la Generalitat Valenciana, de la Comunidad de Madrid, de la Junta de Castilla y León, de La Rioja y de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, todas en manos del Partido Popular. Las únicas regiones con gobiernos socialistas que intervinieron fueron Aragón y Asturias.

Las CCAA con ejecutivos populares consideran "insuficiente" el Plan de Vivienda del Gobierno central, critican las iniciativas que se han puesto en marcha dentro del Plan de Medidas Urgentes y consideran inadecuada la iniciativa de Sociedad Pública de Alquiler porque ha demostrado que "no da resultados", es "un fracaso", según los consejeros del PP, y porque invade competencias de las regiones.

El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Comunidad de Madrid, Mariano Zabía, pidió a la ministra que reconsidere la situación y la "retirada del plan", mientras que el consejero de Fomento de Castilla y León, Antonio Silván, señaló que el plan no da respuesta a las necesidades de creación de vivienda protegida en su región y acusó a la ministra de crear una situación de "permanente confusión" al ciudadano en esta materia tan sensible.

El conseller del Territorio y Vivienda de la Generalitat Valenciana, Rafael Blasco, pidió a la ministra que reparta las ayudas del plan en función de las necesidades estructurales de cada comunidad autónoma. No obstante, también ofreció diálogo y colaboración a la ministra porque, según dijo, "la resolución del problema de la vivienda tiene que estar por encima del color político de las Administraciones".

El consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transporte de Aragón, Javier Velasco, consideró el Plan de Vivienda del Gobierno de "valiente" y afirmó que llega en el "momento preciso", aunque mantuvo que el ministerio debe abordar el problema de la vivienda siempre con la participación y opinión de las comunidades autónomas.