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TRES DE LOS ISLAMISTAS DETENIDOS EN BARCELONA IBAN A COMETER UN ATENTADO SUICIDA EN EL TRANSPORTE PÚBLICO DE LA CIUDAD CONDAL

MADRID
SERVIMEDIA

Los presuntos terroristas islamistas detenidos el pasado viernes en Barcelona tenían previsto cometer un atentado suicida, en el que iban a inmolarse tres de ellos el pasado fin de semana en el transporte público de la Ciudad Condal.

Así consta en el auto dictado por el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, con el que decretó esta tarde el ingreso en prisión incondicional de 10 de los 12 detenidos que habían pasado a disposición judicial, a los que imputa un delito de pertenencia a organización terrorista.

A ocho de estos diez presuntos terroristas, el juez les imputa, además, un delito de tenencia y fabricación de explosivos. Moreno dejó en libertad sin medidas cautelares a Mohammed Imren y Sarosh Aki Mohammed.

El magistrado afirma en su auto que el grupo "habría alcanzado plena capacidad operativa a nivel humano y se encontraría muy próximo a conseguir plena capacidad técnica a nivel de artefactos explosivos".

Moreno indica que, tras conseguir este nivel operativo, los integrantes de esta célula terrorista "pretendían llevar a cabo diversas acciones terroristas suicidas el pasado fin de semana (18, 19 y 20 de enero) en transportes públicos de la ciudad de Barcelona".

Según el escrito, el grupo estaría compuesto por Maroof Ahmed Mirza, Mohamed Tarik, Qadeer Malik, Hafeez Ahmed, Roshan Jamal Khan, Shaib Iqbal, Imram Cheema, Mohammad Ayud Elahi Bibi, Mohammed Shoaib y Mehmooh Khalid, en total ocho paquistaníes y dos indios.

Del auto del juez Moreno se desprende que uno de los elementos clave para conocer la actividad de la célula ha sido la declaración de un testigo protegido.

TRES TERRORISTA SUICIDAS

Los tres presuntos terroristas suicidas, quienes estaban dispuestos a inmolarse en el atentado que pretendían cometer el pasado fin de semana, son Imram Cheema, Mohammed Shoaib y Mehmooh Khalid.

El auto detalla que estos tres presuntos terroristas suicidas "llegaron a Barcelona en fechas recientes" procedentes de Paquistán, en concreto entre el 8 de octubre y mediados de diciembre de 2007.

Moreno puntualiza que en las células terrorista islamistas "es un patrón común para ejecutar sus acciones terroristas desplazar a los suicidas poco tiempo antes de llevarlas a cabo".

Los dos jefes de la célula serían Maroof Ahmed Mirza y Mohammed Ayud Elahi Bibi, a quienes el juez atribuye "el liderazgo ideólogico y operativo", y quienes "gozaban de gran respeto por parte del resto de los miembros del grupo".

Por otro lado, el auto señala que el grupo encargado de la fabricación y manipulación de explosivos estaba formada por Maroof Ahmed, Qadeer Malik y Sahib Iqbal y líderado por el paquistaní Hafeez Ahmed, a quien el juez califica de "experto" en la materia.

EXPLOSIVOS Y TEMPORIZADORES

En los registros domiciliarios practicados tras la desarticulación de la célula se encontró nitrocelulosa, así como "elementos mecánicos y eléctricos, aptos para la construcción de uno o varios artefactos explosivos".

El juez Moreno indica en su auto que estos artefactos explosivos, "si bien carecían de la suficiente potencia destructiva para la comisión de un atentado con garantías de causar estragos, pudieran ser válidos para la enseñanza de la manipulación de artefactos explosivos caseros que limitaran el riesgo para la integridad física de sus manipuladores".

Por último, el auto señala que los presuntos terroristas constituían "un grupo organizado con una clara y especializada división de funciones, cohesionados ideológicamente por su adhesión a una postura extremista del Islam".

Tan sólo 12 de los 14 detenidos el pasado viernes en Barcelona pasaron a disposición judicial esta mañana después de que ayer martes la Guardia Civil pusiera en libertad a dos de ellos, según informaron a Servimedia fuentes de la Benemérita.

Los otros 12 detenidos fueron trasladados a primera hora de esta mañana a la sede de la Audiencia Nacional, donde, uno por uno, han declarado ante el juez Moreno. Ninguno de ellos se negó a declarar aunque todos negaron las imputaciones.

La operación en la que resultó desarticulada la célula terrorista fue realizada por la Guardia Civil el pasado viernes y se inició tras conocer "la inminencia de un atentado terrorista en el territorio de España", revela el juez Moreno.

(SERVIMEDIA)
23 Ene 2008
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