El procedimiento la adquisición de estos trenes se inició el pasado 28 de marzo con la autorización del Consejo de Administración de Renfe del pliego de condiciones para fabricar entre 26 y 40 trenes, capaces de hacer el recorrido entre Madrid y Barcelona en dos horas y media y de alcanzar velocidades punta de 350 kilmetros por hora. La inversión prevista asciende a 111.000 millones de pesetas.

El futuro tren de alta velocidad tendrá tres clases: Club, Preferente y Turista, y dispondrán de cafetería, servicio de restauración en el asiento para las clases Club y Preferente, pantallas de video, e incorporación de los sistemas necesarios para la eliminación de barreras arquitectónicas para los discapacitados físicos.