En declaraciones a Onda Cero, Aznar señalo que en este terreno, el Gobierno actuará con toda prudencia, "pero también con toda decisión", y añadió que si se pretende transformar el abandono provisional de la violencia en uno definitivo, "deben darse los pasos muy claros en este sentido, y si se consolidan las situaciones, ser generoso".

En este sentido, apuntó que "ojalá" la tregua anunciada por ETA sea definitiva, y la paz sea "duradera, real y de ahora y para siempre. Esa es mi espeanza, esa es mi ambición, y ese es el trabajo que desarrolla el Gobierno, y yo muy personalmente".

En relación a las reivindicaciones nacionalistas de modificar la Constitución, el presidente del Gobierno explicó que la Carta Magna "goza de una excelente salud", y agregó que ésta establece sus propias reglas para la reforma. "Si alguien pretende defender ideas de reforma de la Constitución, debe respetar las reglas", advirtió.

Por otra parte, Aznar manifestó que no tiene la intención de adelantarlas elecciones generales, y precisó que es bueno que se agoten los plazos, "y por lo tanto, las elecciones generales se celebrarán en el año 2000, como estaba previsto".