Perata es el trásfuga cuyo voto mantiene la mayoría absoluta del Partido Popular (PP) de Baleares en la cámara regional, tras la ruptura del pacto de gobierno entre los populares y Unión Mallorquina (UM).

El presidente del Parlamento de las Islas Baleares, Cristóbal Soler, explicó hoy a Servimedia que la orden se debe al desacuerdo interno en el grupo mixto, ya que Peralta había solicitado la portavocía hace varios meses. "Y he resuelto que la portavocía sea rotatoria", sentenció Soler.

La orden de pesidencia ha causado gran malestar entre la oposición. El actual portavoz del grupo mixto, Miguel Pascual, se lamentó de que "el presidente del Parlamento está de rodillas ante el jefe del ejecutivo Gabriel Cañellas", dijo, "Cañellas se pone por montera los principios democráticos", concluyó.

"Un trásfuga no puede ser portavoz de partido político alguno", se quejó hoy el portavoz del grupo parlamentario socialista, José Alfonso Villanueva. "Este es el último pago político que Cañellas le ha dado al tráfuga que le apoya", afirmó.