Según informaron a Servimedia fuentes parlamentarias, el ministerio se ha comprometido a remitir el documento al Congreso a finales de este mes o principios de marzo. Posteriormente, los portavoces de los grupos parlamentarios se reunirán durante dos días fuera de Madrid para trabajar sobre el borrador del Gobierno e incluir sus iniciativas.

El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales aboga por implantar un sistema públio y privado de atención a las personas dependientes, principalmente mayores y discapacitados. Cualquier otro sistema, según las fuentes consultadas por Servimedia, "estaría alejado de la realidad".

Asimismo, la idea que tiene el Gobierno del PP es modificar las pensiones de viudedad, con el fin de que el nivel de renta de la mujer sea más importante a la hora de conceder esta prestación que el hecho de haber estado casada, que es el principal requisito actualmente.

Hoy en día, la pensión de viudead se liga al hecho de haber estado casado, sin tener en cuenta el estado de necesidad de la persona, lo que, según el Ejecutivo, debe cambiar, para que prime la situación económica de la viuda.

El tercero de los ejes sobre los que se sustentan las recomendaciones del Gobierno pasa por reordenar las pensiones de viudedad y orfandad para hacer frente a las nuevas realidades sociales.

La idea es hacer frente a fenómenos que se han generalizado en los últimos años, como la proliferación de divorcioso el aumento de las parejas de hecho.

Desde el partido del Gobierno se considera que hay mujeres que dedican toda su vida al cuidado del hogar y de su marido y que, en caso de separación de éste, "se encuentran en una total desprotección, y eso hay que solucionarlo".

Además, se deben afrontar "otras formas de convivencia" diferentes al matrimonio tradicional. Es el caso de las parejas de hecho, en las que en caso de fallecimiento de uno de los miembros no queda derecho a pensión de viudedad para l otro.

En el Pacto de Toledo el Gobierno quiere hacer mención expresa a las nuevas modalidades de contratación, como el caso del tiempo parcial, y la posibilidad aprobada el pasado año de compatibilizar el salario con la pensión.