Caldera, quien intervino hoy en el Foro de la Nueva Sociedad, organizado por Nueva Economía Fórum, en colaboración con la Fundación ONCE y la Fundación Pfizer, subrayó que la aportación de los cuidadores familiares es una "vía excepcional" y a corto plazo, y explicó que el 83% de estos cuidadores son mujeres con más de 53 años y que el 70% de ellas carece de actividad laboral y económica.

"La ley abre la posibilidad de que estas personas tengan una adecuada formación, regulada por el Estado, y una ayuda económica que dependerá del grado de dependencia y de la situación económica de la familia para la atención en el entorno familiar, así como el alta en la Seguridad Social", señaló Caldera.

El ministro definió a los cuidadores del entorno familiar como una "figura transitoria durante un tiempo" y añadió que había que agradecer a esas personas, mayoritariamente mujeres, "ese ejercicio de solidaridad que han estado haciendo. Pero el espíritu que la norma tiene es "dar a los que lo necesitan servicios profesionales", indicó Caldera.

Se refirió también el ministro a la modificación que presenta el anteproyecto de ley para la creación de los seguros de dependencia. "Quien suscriba un instrumento de este tipo podrá luego sufragar el coste que le corresponda con cargo a ese sistema. El tratamiento fiscal será similar a los que presentan los planes de pensiones", precisó.

Concluyó Caldera que el yacimiento de empleo que creará esta nueva norma está en torno a los 450.000 empleos, 350.000 directos y el resto, cuidadores familiares. Añadió que la prestación a la dependencia es un derecho universal, de cobertura pública para todas las personas que lo necesiten a partir de los tres años.