LOS TRABAJADORES DE CORBERO SE MANIFIESTAN PARA PROESTAR CONTRA LA VENTA O EL CIERRE DE LA FABRICA DE BARCELONA

MADRID
SERVIMEDIA

Los trabajadores de la factoría barcelonesa de cocinas Corberó, perteneciente al grupo sueco Electrolux, se concentraron hoy ante la sede de la Consejería de Industria de la Generalitat para protestar contra la venta o el cierre de la factoría, que emplea a un total de 398 trabajadores.

Los empleados de Corberó, que mañana se manifestarán en Madrid ante la sede de Electrolux, en la calle Méndez Alvaro, protesan por las negociaciones que está manteniendo Electrolux con Iar Siltal y otra firma italiana para vender la fábrica de Barcelona.

Según UGT-Metal, la dirección de la empresa ha amenazado a los representantes de los trabajadores con cerrar la fábrica barcelonesa si no fructifica la venta. Electrolux inició las negociaciones de venta después de que la Generalitat rechazase el expediente de extinción de 86 empleos que presentó Corberó.

UGT-Metal asegura que Electrolux tenía previsto, tras el recort de plantilla, trasladar ciertas líneas de producción de frigoríficos y congeladores, que, según este sindicato, es la producción rentable de la fábrica, a otros centros de la multinacional en Europa, incumpliendo así el acuerdo alcanzado con los sindicatos.

El sindicato ugetista asegura que la fábrica de Corberó en Barcelona tiene futuro dentro del grupo Electrolux siempre que sustituya la producción de cocinas por otra gama con mayor futuro y viabilidad, como es el caso de las encimeras, y realice iversiones necesarias para completar las actuales líneas de frigoríficos y congeladores.

UGT-Metal denuncia el incumplimiento que Electrolux ha realizado de los planes industriales acordados con los sindicatos, especialmente en lo que a inversiones se refiere, y denuncia que esos planes sólo han servido hasta ahora para reducir la plantilla. Corberó daba empleo daba empleo a dos mil personas en 1985, año en que Electrolux se la compró a la Generalitat después de que esta la reflotara.

Según UGT, l venta o el posible cierre de la fábrica catalana no es achacable a los costes laborales ni a ratios de producción de la fábrica, que ha disminuido un 2,2% los costes de producción y ha mejorado su productividad un 10% a lo largo de 1995.

(SERVIMEDIA)
25 Oct 1995
NLV