Desde la semana pasada, en la que los trabajadores de Tubacex de las plantas alavesas de Llodio y Amurrio iniciaron una serie de huelgas en protesta por la suspensión de pagos que sugre la empresa; los enfrentamientos con la policía vasca se han ido agravando.

Según informaron fuentes de la Ertzaintza, durante la pasada noche varios operarios de Tubacex sabotearon instalaciones del ferrocarril en Amurrio. Estos hechos provocaron el bloqueo de un tren de mercancías en el apaeadero de Iñarratxu de esta ocalidad.

Según las mismas fuentes, los huelguistas llegaron a atacar a operarios de Renfe, que intentaban reparar la avería, con cohetes, bolas de acero y diversos rodamientos. La Ertzaintza intervino produciéndose un enfrentamiento "cuerpo a cuerpo".

Las descargas policiales llevaron a los agentes y manifestantes al interior de la propia factoría de Tubacex, en Amurrio. En las instalaciones fabriles, la policía vasca localizó diverso material utilizando en los enfrentamientos.

"Cuando esto agentes se retiraban con el material incautado, un trabajador de esta empresa intentó agredir a un Ertzaintza con una barra metálica de grandes dimensiones", aseguró la policía vasca.