TORO VIAJO A MARRUECOS CON UNA "CARAVANA" DE TRAFICANTES DE DROGA
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Antonio Toro Castro, imputado en el sumario del 11-M como integrante de la "trama asturiana" que proporcionó los explosivos a los autores de los atentados de Madrid, viajó a Marruecos años antes de esta acción terrorista como miembro de una "caravana" de traficantes de droga.
Según consta en el sumario de la "Operación Pipol", remitido a la comisión del Congreso que investiga la masacre de la capital de España, Toro participó en una operación de compra de hachís en territorio marroquí junto a un grupo radicado en Asturias, varios de cuyos miembros se desplazaron al país norteafricano en varios vehículos.
La existencia de este viaje fue conocida por la Brigada de Policía Judicial de Gijón mediante unas escuchas telefónicas en 2001, realizadas en el marco de una investigación por tráfico de drogas que llevó el juzgado de Instrucción número 1 de esta ciudad.
En esta causa fueron investigados tanto Toro como su cuñado, José Emilio Suárez Trashorras, también implicado en la masacre del 11-M.
En este sentido, tras el pinchazo a un teléfono usado por Toro, se supo que éste, un tal Marcos Barreiro y "presumiblemente otras tres personas, viajaron en dos vehículos al sur de la península y Marruecos, donde se abastecieron de una indeterminada cantidad de hachís, según se observa de forma clara en las conversaciones registradas y grabadas en la cinta primera, cara A".
En las mismas diligencias se añade que otra persona, identificada como "Iván", también pudo viajar a Marruecos y llevó la droga en un vehículo que iba en segundo lugar, mientras que Toro y un tal Marcos Barreiro "le dieron cobertura".
De la lectura de las escuchas policiales se deduce que el viaje a Marruecos fue realizado en junio de 2001, aunque los agentes no lo aclaran de forma expresa. En este sentido, puede deducirse que esta operación de compra de estupefacientes fue uno de los datos reunidos por la Policía y que les llevaron a trasladar sus investigaciones al juzgado.
La "Operación Pipol" fue mencionada en el curso de la investigación parlamentaria del 11-M porque en esta operación policial de 2001 a Antonio Toro le fueron incautados 16 cartuchos de dinamita industrial, del tipo "Goma 2 Eco", como los usados el 11-M, así como detonadores eléctricos industriales.
El acceso de Toro a estos explosivos y detonadores fue utilizado después por la "trama asturiana" para proporcionar a los autores de los atentados del 11-M los elementos con los que llevaron a cabo la masacre de Madrid.
(SERVIMEDIA)
26 Ene 2005
NBC