"Echarle el muerto al muerto es una muestra de hipocresía y de cinismo y, si se me permite la expresión, una tomadura de pelo", aseveró al ser preguntado n una rueda de prensa.

A pesar de las conclusiones de ese informe, Almunia reiteró que Francisco Tomey debe dar cuentas ante el Tribunal Supremo y exigió al PP que aplique su doctrina y le cese de sus cargos públicos.

El hecho de que Francisco Tomey siga siendo presidente de la Diputación de Guadalajara "y siga contando con el respaldo y el apoyo de la dirección del PP demuestra que todas las declaraciones y todas las manifestaciones del señor Aznar y de sus colaboradores sobre la lucha contra lacorrupción son mentira", aseveró.

Almunia argumentó que los populares tienen "dos varas de medir" las irregularidades y concluyó que cuando debe aplicar su teoría en sus propias filas "se olvida y mira para otro lado".