Tomás y Valiente, que participó en una conferencia en la capital hispalense, aseguró que el proceso de reforma de la Carta Magna es complicado y difícil. "hay que caminar muy despacio y requiere previamente el consenso de todas las fuerzas políticas", dijo en el transcurso de la inauguración del curso "España y las españas" organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.

A su juicio, a pesar dl aparente consenso entre los grupos políticos sobre la necesidad de reformar el Título VIII de la Constitución y ejecutar la reforma del Senado, no es viable un consenso político entre los grupos parlamentarios sobre qué reformar hacer y cómo efectuarla.

"Yo soy partidario de la reforma de la Constitución cuando todas las fuerzas políticas que redactaron la Constitución, o herederas de ellas, estuvieran de acuerdo en el contenido de una reforma, y eso es difícil que se dé en ninguna materia, tal vez i si quiera en la reforma del Senado, y por consiguiente hay que ir muy despacio", aseguró.

En su opinión, cualquier reforma debe estar alejada de un momento político concreto. "Si hay que reformarla, nunca será consecuencia de las declaraciones de tal o cual político en campaña electoral. Es una cosa muy seria, no puede ser fruto de problemas coyunturales o reivindicaciones optimistas".

Tomás y Valiente propuso también la creación de una comisión integrada por los presidentes de las 17 comunidads autónomas para abordar un debate minucioso sobre las posibles reformas a realizar.