Iranzo apostó por que los países del euro tendrán estabilidad en sus tipos de interés, al menos hasta finales del año. Sólo factores como un hundimiento de la economía europea o riesgos inflacionistas podrían, en su opinión, provocar bajas y altas, respectivamente, en el precio del dinero.

Añadió que tampoco hay riesgo de que el BCE intervenga en el mercado cambiario para contrarretar la apreciación del dólar. El director del IEE destacó el buen efecto que ha tenido la decisión de Estados Unidos en el mercado, puesto que han cesado las especulaciones.