No obstante, la misma revista, en el cuadro de previsiones macroeconómicas que ha realizado este mes de noviembre para los países más desarrollados del mundo, prevé que el conjunto del área del euro crecerá el año que viene, año de lanzamiento de la moneda única, un 2,3 or cien, es decir, 1,1 puntos menos de lo calculado para España.

Además, "The Economist" mantiene inalterada su previsión de que el PIB de España crecerá en 1998 un 3,8 por cien, una décima más incluso que lo estimado por el Ejecutivo, y mejora una décima su previsión de inflación tanto para 1998 como para 1999, que deja, respectivamente, en el 1,9 y el 2,2 por cien.

A su juicio, España resistirá mejor que otros países que asumirán la moneda única el impacto de la crisis internacional, ya que par el conjunto del área euro ha rebajado su previsión de crecimiento en tres décimas, del 2,6 al 2,3.

Asimismo, entre los quince países desarrollados analizados por "The Economist", sólo España tendrá el año que viene un incremento superior al 3 por cien. Para el resto, las previsiones son las siguientes: Australia (2), Austria (2,4), Bélgica (2,2), Gran Bretaña (0,7), Canadá (1,8), Dinamarca (2), Francia (2,3), Alemania (2), Italia (2,1), Japón (-0,8), Holanda (2,7), Suecia (2,5), Suiza (1,6) y EstadosUnidos (1,7).

Por lo que se refiere a las cuentas exteriores, la revista pronostica que España tendrá un superávit del 0,1 por ciento del PIB en su balanza por cuenta corriente de este año y un déficit del 0,5 por cien el que viene.

"The Economist" revisa sus previsiones cada mes y en noviembre ha rebajado por segunda ocasión consecutiva el crecimiento esperado en 1999 para todos los países analizados, debido a los efectos de la crisis financiera internacional.

La revista británica elabora ss previsiones promediando las estimaciones realizadas por veinte entidades financieras internacionales de reconocido prestigio, como Paribas, JP Morgan, Goldman Sachs y Merrill Lynch.