Benavente explicó que, una vez que se han trasladado a la zona de Bolu tiendas de campaña para dar apoyo y cobertura a los tres hospitales de la ciudad que atiende a los heridos, es necesario prestar atención psicológica a los afectados, especialmente a os niños, que se ven desamparados y desorientados.

Según dijo, el terremoto se ha cobrado ya más de 300 víctimas mortales, más de 3.000 heridos y unos 40.000 damnificados en las zonas de Düzce y Kaynasli.

Benavente señaló que a la zona de Bolu se han trasladado tres delegados de Cruz Roja, que han participado en el rescate de las víctimas y están llevando a cabo tareas de identificación y evaluación de las primeras necesidades y de los daños ocasionados por el seismo.

Asimismo, destacó que s ha trasladado a la zona material de rescate y socorro (cascos, linternas y vestuario), un generador eléctrico, postes de iluminación , materia sanitario y logístico.

Además, la CRE tiene instalada en Adpazari, desde el primer terremoto en agosto, dos unidades de Cuidados Básicos de Salud (UCDS) formada por dos pabellones, con una zona de urgencias, curas, así como material sanitario e instrumental básico. Si fuera necesario, alguna de las dos se trasladaría de inmediato a la nueva zona de tragedia. Finalmente, señaló que la mayoría del material que Cruz Roja está trasladando a la zona afectada ha sido comprado en los mercados del país y que de momento no se va a realizar ningún envío de ayuda humanitaria desde España.