En un acto celebrado con motivo de la Fiesta de la Comunidad Autónoma, Leguina pronunció un discurso en el que mostró su satisfacción por los titulares de la prensa de hoy, en los que afirmaba que e Gobierno regional entrega su mayor distinción al "cura rojo" y a la primera cantante madrileña de ópera con categoría internacional.

Leguina manifestó que "la vida ejemplar del padre Llanos y la extremada dedicación a la músiva y al arte de Teresa Berganza son motivos más que suficientes para hacerse acreedores de este galardón".

Tras recoger la medalla, el padre Llanos agradeció la distinción y definió como "un regalo de Dios" la oportunidad de desarrollar su labor sacerdotal en el popular barro madrileño de El Pozo del Tío Raimundo, tarea a la que ha dedicado la mayor parte de su vida.

El padre Llanos anticipó ayer, en el programa de Telemadrid "El Pantallazo", que lo más probable es que regale pronto la medalla que se le ha concedido hoy porque eso es lo que más le gusta hacer con las cosas que le dan.

Por parte de Teresa Berganza, recogió el galardón su marido, José Rifá, ya que la cantante se encuentra en Amsterdam por compromisos contraidos hace años.

El acto estuvo amenizadopor un concierto de guitarra española de la solista Maria Esther Guzmán Blanco, que interpretó piezas de Scarlatti y Albéniz. Asistieron al concierto el padre Federico Sopeña, presidente de la Academia de Bellas Artes, y el teólogo progresista Enrique Miret Magdalena.

También estuvieron presentes el director del Instituto de las Artes Escénicas y de la Música, Enrique González Sinde; el presidente de Comisiones Obreras, Marcelino Camacho; el Gobierno regional en pleno; el alcalde de Madrid, Agustín Roríguez Sahagún; y otros destacados miembros de la política, la empresa y la cultura de la Comunidad de Madrid.