El avance del mar ha hecho saltar la alarma en playas como las de Mazagón e Isla Cristina, zonas muy castigadas por el temporal y en las que el mar ha ganado terreno a las zonas arenosas.

Joaquín Rodríguez, profesor de Geodinámica de la niversidad de Huelva, explicó que no existen estudios concretos que anuncien la desaparición de las playas en un plazo concreto, aunque subrayó que "irremediablemete va a ocurrir".

En los últimos años, las playas onubenses de La Antilla, La Bota, Isla Cristina o Mazagón han sido regeneradas artificialmente a causa de los efectos del avance del mar. Para ello se transportaron grandes cantidades de arena desde otras playas menos afectadas.

Según Rodríguez, la zona de Huelva que corre mayor peligro ebido al avance del mar es la desembocadura del río Guadiana, en Ayamonte. A su juicio, la construcción de puertos, diques, edificaciones y otras instalaciones urbanísticas provoca también el avance del mar.